jueves, 2 de diciembre de 2010

Aplique la ‘malicia positiva’

La Policía resalta la importancia de hacer la denuncia en caso de ser víctima de un atraco y sugiere no resistirse ante un robo.

Si usted llega a ser objeto de un robo, lo mejor es no resistirse, recomienda Bolívar Lasso, subcomisionado y jefe del Departamento de Seguridad de la Policía Nacional.

Ante una situación de peligro, propone observar bien al delincuente y entregarle los objetos que reclama; seguidamente, proceda con la denuncia en la estación de policía más cercana, ya que de ser capturado, el malhechor será procesado por la justicia, explica Lasso.

El Sistema Nacional Integrado de Estadísticas Criminales (SIEC) ubica el robo en cuarta posición como el delito más frecuente con mil 865 casos en 2009 y mil 782 en 2010.

Los robos con mano armada registrados por el SIEC, reflejan que en 2009 hubo 7 mil 530 casos y en lo que va del 2010, 7 mil 810, lo que representa un incremento en este tipo de delito en 280 nuevos casos.

Por encima del robo están el hurto, el robo con arma y la violencia doméstica, respectivamente.

CUIDADO

Para no ser víctima de los delincuentes, el subcomisionado enfatiza que la medida ideal es la prevención.

Sea un observador, así sea que esté caminando por la calle, se traslade en el automóvil, esté retirando dinero de un cajero automático o visite un centro comercial.

Lasso insiste en que se debe verificar quién está a su alrededor, en otras palabras, aplicar la “malicia positiva” y de ser el caso, notificar a un policía que probablemente es seguido por un desconocido.

Lo mismo ocurre cuando esté llegando a su propia casa. El subcomisionado recuerda que es necesario ser perspicaz; por ejemplo, si hay un vehículo sospechoso afuera de la residencia, lo mejor es no detenerse allí, sino dirigirse donde un vecino cercano o al cuartel policial del área.

Las autoridades llaman la atención en momentos que se disponga a salir de su casa, ya que hay ladrones que se hacen pasar por funcionarios de algunas empresas públicas y privadas y utilizan este argumento para ingresar a las residencias y realizar los hechos delictivos.

Lasso advierte no contar dinero en un área pública, acompañar siempre a los adultos mayores en sus diligencias y llamar al número 104 ante cualquier situación que se considere irregular.

CAUSAS

Usualmente cargar bolsas, los paquetes, caminar azarado y tener de la mano a un niño inquieto es suficiente para caer en la trampa de los amigos de lo ajeno.

El jalón del bebé es el que aprovecha el maleante: “te hala la bolsa y pensaste que era el niño, te saca la cartera y piensas igual. El delincuente estudia a la víctima, la sigue y espera el momento oportuno para cometer lo ilícito”, dice Lasso, sin olvidar el uso del blackberry que también ha sido el motivo de muchos casos de hurtos.

Ricaurte Grajales Pezet, gerente de operaciones en Multicentro y especialista en seguridad, explica que “comprar tiene que ser un placer, por lo tanto, las personas suelen olvidarse de las preocupaciones”, lo que representa un descuido de los consumidores del que se aprovechan los ladrones.

Grajales asegura que la incidencia de delitos dentro del mall es “baja” y reconoce que diciembre es el mes con mayor venta comercial en el año, por lo que recomienda, de ser posible, dejar las compras en el maletero del auto.

Propone no dejar las carteras abiertas, verificar cada vez que hagan pagos con sus tarjetas de crédito en restaurantes y tiendas, además de mantener el llavero o el celular en los bolsillos de la ropa; así evitará abrir o cerrar su cartera mientras compra.

¿SóLO EN PANAMÁ?

El sociólogo Guillermo Cedeño comenta que el comportamiento para estas fechas en otras culturas es “muy parecida” a la nuestra.

Considera Cedeño que esta manifestación de histeria masiva es contagiosa.

Desde su punto de vista, Cedeño describe este agitado comportamiento de fin de año como una especie de frenesí de consumo.

Para él, esto empezó con un sentido religioso que durante el siglo XX se transformó paulatinamente en un evento comercial de “proporciones descomunales”.

Cedeño está consciente de que el consumo no es del todo negativo, ya que alimenta positivamente la economía del país, sin embargo, sí le preocupa el consumo conspicuo (sin control), que dice le va ganando la partida a todo lo demás relacionado con las fiestas de diciembre.

Jueves 2 de diciembre de 2010
Diario La Prensa / Sección Vivir +
JESÚS MARTÍNEZ
jmartinez@prensa.com
Panamá, República de Panamá